Durante el terciario el clima en Europa era mucho más cálido, parecido al clima subtropical actual.
Entonces el tipo de plantas que habitaban esta zona eran aquellas que hoy encontraríamos en paisajes muy diferentes.
Pero la mayoría de estas plantas no consiguieron sobrevivir a los grandes cambios climáticos que sobrevinieron con la época de las glaciaciones.
Tan solo algunas como la pequeña oreja de oso (ramondia pyrenaica) consiguieron adaptarse a las condiciones extremas y sobrevivir hasta hoy. De hecho, la familia de la oreja de oso predomina actualmente en toda Sudáfrica.
Podemos observarla en todo el Parque Nacional y en los Pirineos en general.